Daniel Goleman es psicólogo, periodista y autor de libros tan influyentes como «Inteligencia emocional: por qué es más importante que el cociente intelectual». Su labor divulgativa del concepto de inteligencia emocional y su aplicacion al liderazgo es muy importante. En este video podemos escucharle explicar cómo el liderazgo es, en gran medida, la habilidad de ayudar a nuestros colaboradoradores a mantenerse en un estado neurológico óptimo para trabajar, conocido como «Flow» (Fluir). Estudios realizados con diferentes individuos que alcanzaron la excelencia en diferentes contextos, como el deporte, el arte o la ciencia, encontraron que dichos sujetos tenían en común ciertos rasgos en su estado mental:
- Concentración: la atención está volcada al 100% en la taréa que realizan.
- Flexibilidad: capacidad para adaptarse a lo que surja y afrontar los imprevistos.
- Reto: las habilidades son puestas a prueba al máximo nivel de exigencia, incluso superándolo.
- Bienestar: un importante elemento a considerar es que los individuos en estado de «flow» se sienten bien, hay una excitación que les inunda por estar haciendo lo que mejor hacen.
Por tanto, el estado mental en el que los sujetos rinden al máximo es también aquel que les hace sentir mejor, por tanto un lider hábil e inteligente intentará mantener a sus colaboradores en dicho estado. Algunos consejos para contribuir a crear el «flow»:
Metas claras: claridad sobre los objetivos a alcanzar y flexibilidad en los métodos para alcanzarlos.
Feedback inmediato: ayuda mucho saber si estamos haciendo las cosas de forma correcta o si debemos hecer ajustes para acercarnos a la meta.
Reto y posibilidades de crecimiento: debemos asignar a cada individuo tareas acordes a su nivel de competencia. Un reto excesivo le bloqueará, pero una taréa aburrida puede ser igualmente frustrante.
La segunda parte del video trata sobre el «cerebro social», la capacidad de nuestra mente, descubierta en los últimos años, de conectarnos con el estado mental de otra persona. Todos sabemos que las emociones son contagiosas y el «cerebro social» hace que todos nos contagienmos de las emociones de las personas a nuestro alrededor. Las personas más influyentes tenderán a transmitir sus emociones a otros, y por tanto un lider debe ser capaz de utilizar esto para el beneficio del grupo.